Los espacios comerciales son mucho más que un local que ofrece un producto o un servicio. Son un portal que puede invitar o hacer declinar a potenciales clientes al mostrar su fachada o interior. Un espacio comercial bien cuidado, no solo agrada a las personas (incluso a quienes no son el público objetivo), sino que las hace sentir bien y las invita a comprar. Esto se logra mediante el interiorismo de un local. Pero ¿en qué consiste el diseño de espacios comerciales?
¿Qué es el diseño de espacios comerciales?
La sensación que produce un ambiente bien diseñado en un comercio, es la denominada “experiencia de usuario”. Un diseño de espacios comerciales es crear un entorno en donde todos los elementos no solo sean funcionales y de calidad. Sino también que se trate de un espacio bien aprovechado, atractivos, que invite a entrar y a permanecer, en donde se maximice la experiencia de compra. Y de crear un adecuado branding corporativo.
Entonces, el diseño de espacios comerciales no solo aplica a un hotel, a una tienda departamental o a un restaurante. También aplica a una oficina, a un banco, a una cafetería, a una tienda de regalos… a cualquier espacio en donde se lleve a cabo una actividad comercial. Por tanto, en ese espacio se pondrá especial atención al mobiliario, su disposición, su estilo, la iluminación, los colores, etc.
¿Cómo diseñar un espacio comercial?
No solo se trata de adquirir mobiliario, elegir un color y colocar lámparas para que esté iluminado y ya. Al diseñar un espacio comercial es necesario estudiar el local o el lugar donde se ubicará. Esto incluye el proyecto, el diseño y la obra del local. Para armonizar y amalgamarlo todo, es necesario recurrir no solo a decoradores e interioristas, sino a arquitectos. Y es que detrás de todo local de ensueño, hay mucho trabajo y trámites detrás.
Existen diversos trámites que deben realizarse en el ayuntamiento y en otras instancias. Dentro de lo básico está obtener el certificado de compatibilidad urbanística, la licencia de obras, la licencia de apertura o el certificado OCA. Y, al mismo tiempo, contar con un proyecto de interiorismo, así como con un proyecto de actividad o proyecto técnico, además de un director de obra (tarea que no necesariamente es apta para un decorador). Es así que si se cuenta con un completo equipo de profesionales la obra, en su totalidad, será llevada a buen término y con total éxito.
¿Cómo afecta el interiorismo a la experiencia de compra?
Para lograr una buena experiencia de compra, es necesario que haya un interiorismo comercial bien cuidado. Conocer bien al público objetivo es primordial, es un punto de partida para elegir desde la ubicación, el estilo, la iluminación… Es convertir al potencial comprador en protagonista y mimarlo a través de los sentidos, principalmente el de la vista. Debe entonces enamorarse del lugar y a partir de ahí, convertirlo en su favorito, en un lugar que recomendará y en una experiencia de compra que buscará repetir. Todo gracias a un fitting correcto aplicado al interiorismo.
Amparo Murgui: diseño de espacios comerciales en Valencia
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